Después de FERIA tengo el ESTÓMAGO DESTROZADO


A todos/as nos gusta la FERIA porque en ella nos reímos, bailamos, compartimos muy buenos momentos con amigos/as y familiares, nos encontramos con gente que sólo vemos esa semana, criticamos a esa que lleva un traje feísimo (jajaja, es broma), pero cuando termina….»¡Mátame camión!»

Cuando termina la FERIA, al siguiente día, conocido en ARAHAL como «El lunes de resaca«,  se sufren los siguientes efectos:

  • Sientes que perdiste los pies por el albero (para los desconocedores de las FERIAS andaluzas, el albero es la tierra de las plazas de toros).
  • Quieres matar al turronero porque sólo quieres descansar y él sólo vender mientras te explota la cabeza.
  • Abres los ojos y tu habitación es la selva amazónica.
  • Y lo peor, sin duda, es que tienes el ESTÓMAGO DESTROZADO por el descontrol de comidas y bebidas a deshoras.

Después, decides que te vas a levantar y de camino a la cocina te embriaga ese olor a puchero (caldo con arroz o fideos y método por excelencia frente a la resaca) que te da energía sólo de respirarlo. Cuando llegas por fin, y te tomas ese caldo, que como dice mi madre «resucita a los muertos«, casi te puedes emocionar de lo agusto que te quedas.

Pero claro, no todo van a ser alegrías, cuando terminas de recuperarte te acuerdas que al siguiente día tienes que volver al colegio, instituto, universidad o al trabajo pues, se acabaron las vacaciones de verano y toca volver a la rutina. Y eso te da un bajón que por muchos pucheros que te tomes no tiene arreglo más que el ir habituándote día a día.

Entonces, ¿piensas que esta situación podría evitarse?

Es evidente que en las fiestas solemos excedernos, pero toda situación de desmadre puede controlarse. En el caso de la FERIA, en las casetas suelen tener una carta muy variada de platos, pero siempre son de carne o pescado acompañado patatas y picos (llamados en ARAHAL «Roscos» por la primera marca de envasado de la zona).

Esta variedad es fácilmente modificable si la gente lo solicita, el problema está en no querer hacer comidas más equilibradas y excedernos porque son fiestas y  como se suele decir: «Son cuatro días y hay que disfrutar«.

Simplemente puedes revertirlo con los siguientes pasos:

  • Almorzar o cenar con AGUA, pues sabes que vas a beber antes y después de las mismas. Así ya estarías reduciendo el consumo de alcohol.
  • Elegir en ambas comidas tapas en las que aparezcan VERDURAS y HORTALIZAS y tomarlas en mayor cantidad que el resto de alimentos (carne, pescado, patatas y picos)
  • Elegir una combinación de tapas donde NO REINEN LAS SALSAS, es decir, si pides una que sabes que su contenido calórico es muy elevado, la siguiente que tenga una preparación más ligera.
  • REDUCIR EL CONSUMO DE MARISCO Y JAMÓN a 3 días máximo y sólo en una de las comidas (almuerzo/cena).
  • IR CAMINANDO a la FERIA y en caso de vivir muy lejos, hacer SÓLO LA MITAD DEL CAMINO EN COCHE.
  • Y REDUCIR EL CONSUMO DE ALCOHOL en la medida de lo posible, ALTERNANDO CON REFRESCOS.

Por tanto, la próxima vez que el «lunes de resaca» digas: «Después de FERIA tengo el ESTÓMAGO DESTROZADO» piensa que es algo que puedes mejorar SÓLO SI TÚ LO DECIDES.



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